Femke Liefting: pieza decisiva para los Países Bajos

Un excelente criterio, una presencia imponente, una técnica asombrosa y una gran valentía fueron algunos de los elementos que caracterizaron las actuaciones estelares de Femke Liefting. La guardameta neerlandesa de 19 años ganó el Guante de Oro de adidas de la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA Colombia 2024™.

Nuestro GET destacó su mentalidad en situaciones de gran presión y cómo esta influyó en sus compañeras, transmitiéndoles confianza a la hora de tomar decisiones con y sin la posesión del balón. Su rendimiento fue sistemáticamente alto a lo largo de todo el torneo, en el que realizó varias paradas de mérito en momentos decisivos de partidos importantes, como los dos penaltis detenidos en la victoria de cuartos de final frente a la anfitriona Colombia en un estadio abarrotado.

Fuera del terreno de juego, durante la competición Liefting dedicaba dos horas al día a estudiar. La guardameta confesó que las matemáticas son su materia favorita, por lo que no es de extrañar que mostrara un elevado grado de serenidad y lógica al decidir qué hacer en distintas situaciones.

En este artículo, Pascal Zuberbühler, miembro del GET, destaca dos aspectos del juego de Liefting que reflejaron su habilidad e influencia.

Defender el espacio fuera del área

Un aspecto clave del papel que desempeñaba Liefting en su equipo fue su capacidad para apoyar a su línea defensiva y defender el espacio fuera del área. Nuestro GET quedó impresionado con su criterio y clarividencia acerca de cuándo quedarse a defender la portería y cuándo salir a defender el espacio fuera del área.

Según Zuberbühler, «lo primero que debe analizar la guardameta es si la jugadora con el balón está en disposición de tirar a puerta. De ser así, está claro que debe defender la portería. Luego, puede defender el espacio, pero, en ese momento, la prioridad es la portería. Sin embargo, hay acciones de un partido en que la guardameta puede, y debe, asumir la responsabilidad de defender el espacio fuera del área».

Cuando su línea defensiva corre peligro de verse superada, una portera debe reconocer y entender una serie de factores a la hora de plantearse interceptar un balón fuera del área, como explica «Zubi».

«El primer aspecto importante es la ubicación del balón y la orientación de la jugadora que lo conduce. Una vez que la guardameta tiene la certeza de que la rival no está en condiciones de disparar a puerta, debe evaluar la posición de posibles atacantes que acudan en la ayuda en relación con la de sus propias defensoras. ¿Puede pasar el balón a otra jugadora que abra el juego hacia una parte más peligrosa del campo?».

«En estas situaciones, es fundamental la capacidad cognitiva de la guardameta, que debe ser capaz de leer la situación y calcular la trayectoria del balón, si va a ir por abajo o por arriba, ya que la reacción necesaria varía en función de una u otra circunstancia. También hay que tener en cuenta la velocidad a la que se desplaza la pelota, especialmente en relación con el desmarque de jugadoras rivales que acudan en la ayuda. Las guardametas deben tener en cuenta muchos factores en este tipo de situaciones y ser capaces de analizar, interpretar y decidir con rapidez.

«Una vez tomada la decisión de salir a buscar el balón (o de permanecer en la portería), la acción toma prioridad, y es aquí donde la calidad de los primeros pasos adquiere gran importancia, ya que es fundamental elegir el momento oportuno para intervenir fuera del área. ¿Va a recuperar la guardameta el balón y a iniciar una secuencia de ataque o va a tratar de despejar la pelota en el momento justo para impedir que la rival llegue hasta ella? ¿El balón viene por abajo o por arriba? El gesto técnico debe adaptarse siempre a la situación y a los requisitos específicos de la acción», añade.

Aunque, como podemos ver, las intervenciones fuera del área pueden entrañar bastante dificultad, fue una faceta en la que Liefting destacó con creces. Como se aprecia en el siguiente gráfico, la guardameta neerlandesa se enfrentó a 17 balones en profundidad, 13.3 más que la media del torneo, de 3.7. Cuatro de estos pases procedieron de fuera del área. Liefting realizó un total de 8 despejes, 6.6 más que la media del torneo, de 1.4, lo que pone de manifiesto su presencia imponente, su capacidad para tomar decisiones y su efectividad en estas situaciones.

Zuberbühler usa los siguientes tres vídeos para ilustrar el dominio que mostró Liefting del espacio fuera del área.

«En el primer vídeo, su posición inicial es fantástica. Tras observar y analizar la situación, se da cuenta de que la extremo francesa Aïrine Fontaine (11) no puede marcar desde donde se encuentra. Una vez que se da el pase en profundidad, la guardameta evalúa la jugada a la perfección, da unos primeros pasos explosivos y se lanza con todo a realizar la intervención, teniendo en cuenta en todo momento el desmarque de la delantera. El resultado es un despeje perfectamente medido».

«En el segundo vídeo, Liefting muestra una gran valentía en la toma de decisiones, pero, de nuevo, todo parte de su posición inicial.  Su equipo pierde el balón en una acción en la que la central derecha japonesa Rio Sasaki (6) intercepta la pelota y se hace con el control de la posesión en la divisoria. Liefting considera que la japonesa no puede marcar desde ahí y pasa a analizar la situación que tiene delante. Cuando el balón rebasa a su línea defensiva, consciente de la dificultad de la acción, Liefting mantiene la posición hasta que ve que su defensora no puede llegar a la pelota. En ese momento, toma la decisión de salir, mostrando un gran criterio y un excelente sentido de la oportunidad. Leyendo de forma excelente la situación, sale a despejar con gran valentía, determinación y presencia».

«Por último, en el tercer vídeo, Liefting vuelve a mostrar una gran lectura del juego. Este análisis de la situación le permite percibir la explosividad de la atacante estadounidense Taylor Suarez (14) y darse cuenta de que es probable que supere la línea defensiva valiéndose de esta velocidad. Resulta obvio que, si se quedara dentro del área, propiciaría un uno contra uno. Sin embargo, la neerlandesa se da cuenta rápidamente del peligro y decide salir, por lo que realiza un valiente despeje con una intervención perfectamente medida. Es una acción de gran nivel», añade «Zubi».

Distribución al espacio entre líneas

Cuando Países Bajos tenía el balón, Liefting demostraba su capacidad para superar las líneas del entramado defensivo rival, al reconocer el momento oportuno para enviar balones al espacio para sus compañeras, según Zuberbühler.

«Pudimos apreciar su comprensión del juego y su capacidad para leer las distintas situaciones. Incluso antes de recibir el balón, analizaba la situación para saber dónde había espacios y dónde se encontraban sus compañeras. También sabía cuál era el momento idóneo para dar un pase directo y cuándo debía jugar al espacio para que otra compañera lo aprovechara. Este nivel de toma de decisiones y de ejecución técnica es muy elevado para una jugadora tan joven».

Antes de que una guardameta reciba el balón, debe ser consciente de lo que tiene delante y de las opciones de que dispone. Una vez que recibe, debe reevaluar rápidamente la situación antes de pasar, para asegurarse de hacerlo en el momento idóneo. ¿Ha cambiado algo? ¿Exige la situación un rápido pase de primeras a una jugadora o al hueco? ¿O bien puede controlar el balón y establecer contacto visual con una compañera para indicarle sus intenciones, de modo que esta sincronice sus movimientos para recibir?»

«Son aspectos importantes que también deben tenerse en cuenta en esta situación —señala «Zubi»—. Es crucial que la guardameta elija el momento oportuno, ya que puede habilitar rápidamente a una jugadora en una situación favorable de uno contra uno o dos contra uno, o bien puede que necesite un toque extra para dar tiempo a una compañera a situarse en posición favorable. Una vez tomada la decisión de jugar con su compañera, todo se reduce a la ejecución técnica del pase. El momento de dar el pase y su potencia, trayectoria y ritmo son cruciales para garantizar que la receptora proteja, mantenga o haga circular el balón».

Si la comparamos con la media de las guardametas que participaron en el torneo de Colombia, la actuación de Liefting destaca sobremanera, al completar el 100 % de los pases y de las rupturas de línea por fuera.

A continuación, Zuberbühler ha seleccionado tres ejemplos en los que Liefting distribuyó el balón a compañeras situadas en espacios entre líneas, a fin de destacar su toma de decisiones y su ejecución técnica.

En el cuarto vídeo, correspondiente al partido contra Japón, Liefting juega en corto, pero pasa inmediatamente después a estudiar la situación en previsión de que le llegue de nuevo el balón. Con el cuerpo perfilado, se ofrece para recibir y controla el balón con el pie derecho para eludir la presión. A continuación, demuestra lo cómoda que se siente jugando con ambas piernas, al enviar un precioso balón bombeado al hueco, donde su delantera puede venir a recibir.

En el quinto vídeo, correspondiente al partido contra EE. UU., la guardameta ve la oportunidad de superar las líneas con otro pase bombeado, en este caso a su delantera centro. Primero, se ofrece para recibir con el cuerpo perfilado a fin de tener una visión completa del campo. De este modo, en el momento de recibir, puede ver que su delantera centro está libre entre las líneas medular y defensiva de las estadounidenses. Antes de recibir, Liefting sabe que es allí donde va a jugar a continuación, por lo que se acomoda el balón con el primer toque y vuelve a comprobar si sigue habiendo opción de pase. Una vez que decide dar el pase, usa el pie derecho para imprimirle la potencia perfecta, de tal modo que la pelota supera por arriba dos líneas del entramado defensivo estadounidense y llega hasta la zona donde espera Robine Lacroix (10).

En el sexto vídeo, correspondiente a un saque de puerta, vemos de nuevo cómo Liefting se perfila para estudiar la situación, gracias a lo cual divisa a Lacroix (10) entre líneas. Libre de presión, la guardameta tiene tiempo de meditar el pase y de imprimirle la potencia perfecta con el pie derecho para superar las líneas y permitir que su compañera reciba.

Liefting transmitió confianza a sus defensoras con su presencia imponente, su valentía a la hora de tomar decisiones y su determinación, tanto con la posesión del balón como sin ella. Gracias a su lectura del juego, su capacidad cognitiva y su sentido de los tiempos, mostró una gran firmeza defendiendo el espacio tanto dentro como fuera del área.

Con la posesión del balón, estudiaba la situación para analizar la posición de sus compañeras y buscar espacios, con vistas a dar pases que superaran las líneas rivales. A pesar de sus 19 años, la guardameta mostró una gran madurez y valentía a la hora de tomar decisiones y ejecutar las acciones propias de su demarcación. Con su serenidad en momentos decisivos de partidos importantes, influyó enormemente en la gran actuación de su equipo en el torneo.