En 2005, condujo al Amazones al campeonato de liga de Costa de Marfil y, un año después, al título de copa de la federación.
Tras un exitoso periplo como entrenadora en Guinea Ecuatorial, fue nombrada seleccionadora de la selección femenina. En 2008, sus pupilas se proclamaron campeonas de la Copa Africana de Naciones. En 2010, se convirtió en seleccionadora de su país natal, Costa de Marfil, al que llevó a clasificarse para la Copa Mundial Femenina de la FIFA Canadá 2015™, su primera participación en el torneo.
Touré aporta su vasta experiencia como exjugadora y entrenadora al Grupo de Estudio Técnico de la FIFA. La seleccionadora tiene interés en ver la evolución del fútbol femenino desde la Copa Mundial Femenina de 2019™.
«Algunas de las principales tendencias que llamaron la atención durante el torneo disputado en Francia en 2019 fueron la influencia de las guardametas en el rendimiento de su equipo, la calidad de los centros y la mejora del juego de cabeza. Durante la competición también observamos un aumento de la velocidad de juego, no solo con respecto a los movimientos de las jugadoras, sino también a la circulación del balón».
«La técnica de las futbolistas no deja de mejorar. Además, vimos la influencia de las jugadoras de banda y su importancia en el juego ofensivo de su equipo. Tengo mucho interés en comprobar si estos elementos han seguido evolucionando, pero también en ver nuevas tendencias».
«Otro aspecto positivo es el hecho de que participen más equipos en el torneo, ya que, de este modo, se brinda a más jugadoras la oportunidad de disputar una Copa Mundial, algo muy importante tanto para su desarrollo como para el del fútbol femenino en sus países.
Touré está instalada en Brisbane y asistirá a todos los partidos que se disputarán en la ciudad.