Ba, nacido en Senegal, se crio en París —donde jugó al fútbol— y obtuvo la nacionalidad francesa. Durante su carrera como futbolista, militó en clubes de Francia, Inglaterra, Italia, Turquía y Suecia.
Tras colgar las botas, inició su carrera de entrenador como ojeador del AC Milan, club en el que jugó. Ba ha ejercido como tal durante los últimos diez años, al tiempo que finalizaba su formación para obtener las licencias UEFA A, B y Pro. Vistió los colores de la selección francesa en los meses previos a la Copa Mundial de 1998. Le gusta mucho ver partidos y aprender de los planteamientos tácticos que se aplican en distintos países.
Ba nos cuenta sus expectativas con respecto al Grupo de Estudio Técnico del que forma parte durante este torneo.
«Tengo muchas ganas de ver los partidos de las competiciones masculina y femenina. Los Torneos Olímpicos de Fútbol han servido de escaparate para muchos grandes jugadores que los disputaron al inicio de sus carreras. También estoy deseando participar en los debates en torno a ambas competiciones».
Competición masculina
«Ante todo, tengo muchas ganas de ver a mi excompañero Thierry Henry en el cargo de seleccionador. Se trata de una experiencia fantástica para la formación de los entrenadores y jugadores. Son plantillas muy potentes, pero también muy reducidas, con tan solo 16 jugadores de campo y dos guardametas, por lo que todos los futbolistas deberán aportar su granito de arena. Muchas de estas selecciones apenas han tenido tiempo para que sus jugadores se compenetren, sobre todo con la incorporación de tres futbolistas mayores, por lo que será muy interesante ver cómo se coordinan en el campo y el planteamiento táctico que utilizan», explicó Ba.
Competición femenina
«Jugué en Suecia en 2005 y me di cuenta de lo importante que era el fútbol femenino allí ya en aquel entonces. Vi jugar a Marta, una de las futbolistas más grandes de la historia. Era muy interesante ver el fútbol femenino, porque había muchos pases en corto y era muy técnico, pero ahora se ha desarrollado mucho más y los equipos tienen varias dimensiones».
«Las jugadoras poseen una mejor condición física, son más fuertes y rápidas, y se pueden observar más cambios de orientación y pases largos, algo que está cambiando este deporte. Las transiciones son más rápidas, y las jugadoras son más agresivas y creativas en situaciones de 1 contra 1. Además, los equipos tienen más variedad táctica. Estoy impaciente por ver los distintos planteamientos tácticos que utilizarán los seleccionadores de un partido a otro y en el transcurso de un mismo encuentro», añadió.
Ibrahim Ba estará en París y estudiará los partidos de ambas competiciones.