Chilenas para el recuerdo en el Mundial de fútbol playa

Tras la disputa de las dos primeras jornadas de la Copa Mundial de Beach Soccer de la FIFA Dubái (EAU) 2024™, se han marcado quince goles de chilena. Por primera vez en la historia, el equipo de análisis y datos de rendimiento de la FIFA está recopilando estadísticas de partidos de fútbol playa. Los datos de los 16 primeros encuentros revelan que se han realizado 245 remates de chilena, que 31 de ellos fueron entre los tres palos y que 29 se hicieron de primeras. Este acrobático recurso técnico requiere una fuerza explosiva, velocidad, precisión y potencia, y cuando se ejecuta con acierto es todo un lujo para la vista.

Dejan Stanković se distingue por su capacidad goleadora. Autor de 47 tantos en la Copa Mundial, ocupa actualmente el segundo puesto en la tabla de máximos anotadores de todos los tiempos en el fútbol playa. El delantero suizo, famoso por sus goles de chilena, forma parte del Grupo de Estudio Técnico (GET) de la FIFA que se ha desplazado al torneo. A continuación, Stanković describe los distintos tipos de chilena que existen y acompaña sus explicaciones con vídeos de algunos de los goles que se han marcado en Dubái.

En la chilena clásica, el jugador controla el balón con un toque y se prepara para el golpeo. Un ejemplo de este tipo es el gol que marcó el tahitiano Heirauarii Salem (9) en el partido de la fase de grupos que enfrentó a su selección contra Argentina. 

«En esta jugada, vemos que Salem queda libre de marca tras una presión sobre su guardameta, por lo que tiene tiempo y espacio para prepararse el balón con un solo toque —explica Stanković—. Esta es la chilena clásica. El jugador sabe cuál es su posición respecto a la portería contraria y, al recibir el balón, tiene el cuerpo perfectamente perfilado, por lo que dispone de tiempo para realizar la chilena con precisión».  

Otro ejemplo de la chilena clásica es la técnica empleada por el iraní Reza Amiri (3) en el gol que marcó contra España. 

«Es un gol especial y de bella factura, sobre todo si tenemos en cuenta que sirvió para adelantar a los suyos en la prórroga. Amiri hace que parezca fácil, pero no lo es, y mucho menos después de haber jugado 36 minutos más el tiempo suplementario. Rematar con una técnica tan precisa con la pierna derecha por encima del hombro derecho y hacerlo con tanta potencia y precisión en el tramo final del partido lo convierten en un gol de primera categoría».

La chilena es una acción protegida: una vez que el atacante tiene el balón controlado, los defensores no pueden obstaculizar la ejecución del remate. En ocasiones, el jugador necesita más de un toque para preparar la chilena, lo que alarga el tiempo durante el que está protegido. Stanković utiliza el gol de Amiri (IRN) contra Argentina para explicar detalladamente esta acción técnica. 

«En este ejemplo, la ejecución es diferente, porque el jugador da varios toques al balón para controlarlo. Como vemos en el vídeo 3, Amiri tiene la pelota controlada y sabe que el defensor no puede disputársela, por lo que únicamente puede tratar de hacer un bloqueo defensivo. Amiri utiliza el pecho para este primer control y, a continuación, da dos toques más para buscar el momento exacto en el que ejecutar el disparo. Este es otro magnífico ejemplo de la técnica de la pierna derecha por encima del hombro derecho».

En las acciones a balón parado, un atacante debe crearse el espacio para poder rematar a puerta de chilena. Según Stanković, cuando se recibe el balón, solo se necesitan uno o dos segundos para tenerlo bajo control.

«En las jugadas a balón parado, crear espacios es muy importante. El vídeo 4 nos ofrece un excelente ejemplo de cómo hacerlo. Fijémonos en los movimientos de Abdulla Abbas (9), jugador de Emiratos Árabes Unidos, antes de marcar un gol en el partido de la fase de grupos contra Estados Unidos. Vemos que está bien marcado, con un defensor delante y otro a su espalda, pero hace un movimiento rápido hacia su derecha para arrastrar al defensa que lo cubre por delante. Al volver rápidamente hacia el compañero que saca de banda, consigue crearse el espacio que necesita para recibir sin oposición. A continuación, controla el balón con el pecho al primer toque y remata con un golpeo limpio».

A la hora de hacer una chilena, la mayoría de los jugadores prefiere contactar con el balón elevando la pierna de disparo por encima del hombro correspondiente (es decir, la pierna derecha por encima del hombro derecho), y algunos futbolistas son capaces de ejecutar este tipo de remates con ambas piernas.

Sin embargo, la técnica cruzada —en la que la pierna de disparo se eleva por encima del hombro contrario— es muy difícil. Aunque se ven muy pocos goles marcados con esta técnica, en este torneo, el delantero bielorruso Ihar Bryshtsel (8) nos ha regalado una extraordinaria muestra de este tipo de remate en la victoria de su equipo contra Japón (3-1).

En palabras de Stanković, «no hay muchos jugadores capaces de ejecutar esta acción. En mi opinión, solo hay dos futbolistas que pueden hacerlo: Bryshtsel y mi compañero de equipo, el suizo Glen Hodel. Esta técnica hace que al defensor le resulte muy difícil predecir por dónde va a salir el remate o intentar bloquearlo. Los jugadores que solo dominan una pierna son previsibles, pero no es el caso de Bryshtsel. Él es capaz de golpear el balón con la pierna izquierda por encima del hombro derecho, y a la inversa, algo muy poco habitual. Es un gol fantástico».

La chilena es una acción explosiva que requiere mucha práctica para dominarla. Este tipo de remate puede ejecutarse de distintas formas, pero todas ellas exigen agilidad, control, coordinación, precisión y potencia. Los goles que se marcan con este recurso técnico entusiasman a los espectadores y siguen siendo uno de los principales atractivos del fútbol playa.

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