Detección del talento

Por las características geográficas de sus territorios, muchas FM tienen grandes dificultades a la hora de crear una red nacional para la detección del talento, y se enfrentan a distintos obstáculos en función de si se trata de zonas urbanas o rurales. Las federaciones deben crear una red nacional de especialistas en la detección del talento que abarque todas las regiones del país. Con ella, conseguirían controlar toda la cantera: no solo a aquellos jugadores que procedan de zonas fácilmente accesibles, sino también a los que residan en áreas rurales de difícil acceso. 

Las FM deben concentrarse en la creación de una estrategia que proporcione una orientación clara, fije objetivos concretos para el desarrollo de sus jugadores y trate de optimizar el potencial de sus canteranos. Lo ideal es que esta estrategia esté estrechamente vinculada a la filosofía de juego y al programa de partidos del fútbol nacional. 

Las federaciones más prósperas han creado instrumentos analíticos para medir y efectuar un seguimiento de sus canteras. Dos funciones básicas de un sistema de detección bien organizado son el uso de bases de datos y la elaboración de gráficos de profundidad para supervisar el talento, y ambas deberían utilizarse en todas las FM. 

Casi todas las federaciones han reconocido que las academias desempeñan una labor fundamental en la detección del talento, por lo que deben existir una cooperación estrecha y una armonización entre los sistemas de la FM y los que se creen en los principales clubes y academias. 

Las federaciones tratarán de formar especialistas que trabajen en la FM y en el fútbol de clubes y conozcan los problemas específicos inherentes a la detección de talentos jóvenes en las diferentes etapas de la estructura formativa. 

Las dificultades geográficas son uno de los mayores obstáculos a la hora de conseguir sistemas eficaces para la detección del talento en las comunidades futbolísticas. Por ejemplo, las diferencias en la densidad de población pueden provocar que algunas zonas parezcan más atractivas que otras para invertir. No obstante, al dar preferencia a unas áreas sobre otras, se corre el riesgo de que algunos talentos pasen inadvertidos. Las comunidades futbolísticas deben esforzarse por crear una red para la detección del talento que abarque la totalidad de sus territorios.  

La transparencia es fundamental en las redes para la detección del talento. Son muchas las partes implicadas en estas redes, donde los clubes y las FM desempeñan funciones de liderazgo. Las personas implicadas deben considerarse parte de un todo y tratar de armonizar sus sistemas e información con los del resto de integrantes de la red. Mejorar los niveles de transparencia y colaboración en los procesos de detección contribuye a aumentar la probabilidad de que una comunidad futbolística brinde una oportunidad a todos los talentos que lo merezcan. 

Los intereses del jugador deben ser el eje central del proceso para la detección del talento. Los sistemas de detección del talento deben intentar estimular, apoyar y proteger a los jugadores mejor dotados para que puedan desplegar su verdadero potencial. Desarrollar a un futbolista es un proceso a largo plazo que requiere paciencia, esfuerzo y pasión por este deporte. El proceso de detección inicial debe recoger también estas cualidades. 

Confiar en los datos. Al desarrollar y utilizar bases de datos, los entrenadores y los clubes pueden estar más seguros de que sus procesos de detección se basan en prácticas objetivas. 

La definición es importante. La organización decide cómo definir el talento para colmar las necesidades de su ecosistema. Por tanto, las FM y los clubes deben elaborar una estrategia detección del talento que se adapte específicamente a las necesidades de su comunidad futbolística y tenga en cuenta multitud de razones relacionadas con el desarrollo para identificar a los jugadores.