Una España versátil y con multitud de recursos encara la primera final de un Mundial femenino de su historia

España es un equipo muy técnico y táctico con el balón en los pies. A lo largo de la competición, la manera en la que ha elaborado el juego y ha subido la pelota se ha caracterizado por unas secuencias de pases complejas y creativas que ha ejecutado de manera impecable. La selección española, que disputará por primera vez la final del Mundial, sobresale a la hora de mantener la posesión bajo presión, y posee la habilidad técnica necesaria para salir con el balón jugado en espacios reducidos. Además, cambia la orientación del juego rápidamente cuando advierte que hay huecos en otra zona del campo.

Anna Signeul ha asistido a algunos partidos de España y resume así sus virtudes con la posesión: «España demuestra mucha paciencia con el balón y se esfuerza por crear espacios en las zonas donde quiere jugar. Sus futbolistas varían el juego para elaborar los ataques e ir avanzando líneas, pero también pueden ser muy directas. Saben dónde están los espacios». 

Los datos revelan que España ocupa la primera posición del Mundial en términos de pases completados e índice de acierto a la hora de romper líneas. En la elaboración del juego en el segundo y el último tercio del campo es segunda y tercera, respectivamente, y ha pasado más tiempo en el último tercio con la posesión del balón que ningún otro equipo. 

La exinternacional neozelandesa Kirsty Yallop explica que el juego por las bandas es otra de las grandes bazas de la Roja cuando tiene la posesión. «A España le gusta atacar desde las bandas, donde opta por triangular. Genera excelentes combinaciones de pases en estas zonas para que sus jugadoras ganen la espalda a las líneas defensivas rivales. Sus laterales, con clara vocación ofensiva, se desdoblan por dentro o por fuera y envían pases muy inteligentes entre las defensoras rivales. También son excelentes centrando el balón, y el equipo ha marcado dos goles directos a partir de estos centros».

Cuando no tiene el balón, España no duda en tratar de recuperarlo lo más arriba posible. De hecho, ha pasado el 5.2 % del tiempo sin la posesión ejerciendo una presión alta, más que ninguna otra selección hasta el momento. Además, ocupa la primera posición en términos de duración media de la presión ejercida.

El tiempo que ha pasado en fase de presión tras pérdida sitúa a España en el tercer puesto en lo que va de competición. Cabe señalar que registra también una importante tasa de acierto a la hora de recuperar el balón en estos periodos. De hecho, la selección española es tercera en términos de duelos físicos ganados por cada 30 minutos.

Además, ha demostrado una gran versatilidad defensiva, y emplea un bloque medio cuando detecta que no es posible ejercer una presión cohesionada. No obstante, cada vez que puede presionar de manera eficaz, lo hace en bloque y demostrando una gran capacidad física.

«Es asombroso cómo España suma efectivos en torno al balón tan rápidamente —afirma Yallop—. Cada vez que pierde la posesión, tiene tres futbolistas cerca de la pelota. Cuando ataca en el último tercio, adelanta mucho la línea defensiva. La posición de sus laterales y de su centrocampista defensiva es especialmente notable, porque a menudo logran hacerse con los balones que despeja la defensa rival. De este modo, están preparadas para defender muy arriba, incluso cuando aún están atacando».

A pesar de tener solo 19 años, Salma Paralluelo (18) ha tenido una gran influencia en el juego cada vez que ha salido desde el banquillo. Paralluelo ganó la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA 2022™ en Costa Rica, donde marcó tres goles. Si bien a algunas futbolistas les cuesta pasar de la categoría juvenil a la absoluta, ella ha demostrado ser capaz de rendir en la élite mundial y revolucionar los partidos gracias a su capacidad técnica y atlética.  

«Ha causado sensación saliendo desde el banquillo en la fase de eliminación directa, porque aporta cosas distintas al equipo —explica Yallop—. Puede jugar en cualquiera de las tres posiciones de ataque, y es excelente técnicamente con ambas piernas: contra Suecia marcó con la derecha y contra Países Bajos, con la izquierda.

Abre las defensas y da a España opciones de ganarles la espalda. Es veloz, fuerte, ágil y sensacional en los 1 contra 1. Es imposible anticipar sus movimientos, lo que la convierten en una pesadilla para las defensas. Es impresionante que una jugadora tan joven protagonice jugadas tan importantes para su equipo y lo haga con esa confianza, incluso en situaciones de máxima presión. ¡Pone al público en pie!».

Aunque cueste creerlo, la portera española Cata Coll (23) debutó en categoría absoluta en el partido de octavos de final contra Suiza y, desde entonces, ha disputado todos los minutos. Su aplomo y capacidad técnica para sacar el balón jugado desde atrás con uno o dos toques han impresionado al GET. Coll se encuentra cómoda defendiendo el espacio que queda por detrás de su línea defensiva y es muy segura a la hora de blocar balones por alto. 

En las siguientes secuencias de vídeo, Pascal Zuberbühler explica algunas de las cualidades principales que le permiten destacar en estas facetas del juego.

Sacar el balón jugado con los pies
«Como vemos en el vídeo 8, la confianza y la percepción del juego que tiene con el balón en los pies es impresionante. Cuando le llega la pelota, advierte que las dos defensas más próximas a ella no son una opción de pase, porque las delanteras suecas las están presionando. No pierde la compostura y envía el balón de nuevo al centro para engañar al equipo rival y abrir nuevas líneas de pase. Supera la primera línea defensiva de Suecia con un pase a su centrocampista de contención e inicia la jugada de ataque —explica Zuberbühler—.

En el vídeo 9 se aprecia lo adelantada que está cuando su equipo ataca en el último tercio: se encuentra a 38 metros de su línea de meta y 35 metros de su línea defensiva. Cuando su equipo necesita volver a iniciar la jugada, ella ejerce de jugadora adicional y cambia la orientación. Además, vemos que sus compañeras no dudan en pasarle el balón a pesar de estar presionada», añade.  

Cubrir el espacio que queda por detrás de su línea defensiva
«El vídeo 10, tomado del partido contra Suecia, es un magnífico ejemplo de cómo juega cerca de su línea defensiva. Está a 25 metros de ella cuando el rival mete un balón interior, y se da cuenta inmediatamente de que debe defender la zona [el espacio que queda entre ella y su línea defensiva]. Su reacción es sensacional y realiza una intervención muy importante, pero la clave es su posición inicial. Si hubiera estado dos metros más atrás, no habría llegado y habría dado lugar a una situación muy peligrosa de 1 contra 1 —comenta Zuberbühler—.

En el vídeo 11, vemos que su línea defensiva está adelantada y, a pesar de salir de su propia área y de estar presionada, pasa el balón de primeras y hacia adelante a una compañera. Advierte que la delantera le tiene ganada la posición a su defensora y toma la decisión de salir y defender la zona», indica.

Balones aéreos
«En el vídeo 12, vemos que su posición inicial para defender un saque de esquina contra Suecia es excelente. A pesar de que el área pequeña está muy poblada, su rapidez de piernas y la manera en que retrocede para tocar el balón son formidables. Interpreta muy bien la situación y sincroniza el salto y la intervención de manera óptima —señala Zuberbühler—.

En el vídeo 13, su posición es excepcional para desbaratar un centro complicado a media altura desde la línea de fondo. Empieza junto al primer palo, pero sin pegarse demasiado a él, de manera que, cuando el rival pone el centro, ella da un primer paso decisivo que le permite impulsarse con la pierna derecha y tocar el balón. Su posición y sincronización en esta jugada son determinantes», añade.

La final de la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™ entre España e Inglaterra se disputará el domingo 20 de agosto en el Estadio de Australia de Sídney a partir de las 20:00 h (hora local).